Cada año, millones de hindúes celebran el Diwali, un festival de luces. Teniendo lugar en el transcurso de cinco días en el otoño, cada día tiene sus propias celebraciones especiales -que varía según las regiones y sus denominaciones-, con el enfoque global sobre la entrega de regalos, contando historias, y el reconocimiento de la interconexión de los seres humanos con su alrededor, que en gran importancia incluye a los animales, y en especial los perros.
El festival nepalí incluye el Kukur Tihar, un día dedicado a los perros, honrarlos por su lealtad inquebrantable y la amistad. Estos canes son adornados con colores simbolizados a través de guirnaldas hechas con flores naturales, conocidas como ‘malla’. Un símbolo de respeto y dignidad, y está destinado a anunciar que quien lo lleva es importante para la humanidad. La frente del perro está marcada con una «tika» roja -con colorante temporal y por sobretodo natural-, que simboliza y designa al animal como un objeto de devoción.
Tal vez la mejor parte de toda la ceremonia, son las abundantes ofrendas de alimentos de alta calidad, establecidas tanto para los perros callejeros como para las personas vagabundas.
Fuente: Erika Mansourian AKC.org
